Pocos
son los que comprueban que todas las cosas tangibles puestas en existencia por
la raza humana tuvieron su origen en el pensamiento, porque el pensamiento, el
sueño, la visión, el ideal siempre precede a la acción positiva y real.
"A
pesar de que las fuerzas más vigorosas, algunos de cuyos efectos conocemos,
como la electricidad y el magnetismo, son invisibles, intangibles y silentes,
todavía somos escépticos en lo que se refiere al valor del pensamiento como
fuerza activa. Somos tan materiales, que es difícil convencernos de la realidad
de lo que no podemos ver, oír ni tocar.
En
realidad, hasta que la mente lo provoca no sucede nada. En este mundo no surge
nada sin que el pensamiento preceda a la acción. Todo lo impulsa el
pensamiento.
‘La
mente conmueve las moles’, el pensamiento es el primer motor de todo lo que
perciben nuestros sentidos.
Es
la fuerza inicial de todo movimiento, de toda empresa, de todo negocio, de todo
éxito. Todas las cosas materiales de este mundo quedarían estáticas, es decir,
no habría movimiento constructivo, si la mente no trazara el camino, sugiriera
el plan y dictara la ordenación".
Pensemos
entonces…